Parece extraño, pero así es: el huevo, a pesar de su pequeño volumen, reúne un montón de virtudes nutricionales que lo convierten en un alimento básico e imprescindible en la dieta de muchas familias de nuestro país. Efectivamente, comer huevos es muy sano, tal como se ha demostrado en diferentes estudios científicos, hasta el punto que los expertos recomiendan un consumo de tres a cuatro por semana.
Algunos de los principales ventajas que nos aportan los huevos para nuestra salud son: la acción antioxidante de algunas vitaminas y minerales que ayudan a reducir el riesgo de la aparición de enfermedades cardiovasculares, así como la progresión de enfermedades degenerativas, como la diabetes, las cataratas o el cáncer; la prevención de posibles daños visuales, como por ejemplo la degeneración producida por el paso de los años; finalmente, benefician el desarrollo del sistema nervioso de los fetos y ayuda a prevenir defectos de nacimiento.